Igrexa de Santa Mariña de Augas Santas

Templo edificado a finales del siglo XII y principios del XIII en estilo de transición del románico al gótico. Tiene un ábside semicircular y un absidiolo semicircular a cada lado, con ventanas estrechas adornadas con columnas y arquivoltas. Sobre el ábside y cada absidiolo hay un pequeño rosetón. Bajo los alares hay canecillos sencillos. La fachada tiene una portada bastante sencilla, pero tiene un bello rosetón flanqueado por dos más pequeños.

Iglesia edificada en el siglo XII, de tres naves con falso triforio y bonita cabecera con tres ábsides semicirculares con rosetón. En el centro está la sepultura de la santa. Alberga unos recargados retablos barrocos encargados por el obispo Muñoz de la Cueva que también mandó levantar el vecino palacio episcopal de verano.

En el siglo IX se descubrió el sepulcro de Santa Mariña por lo que se decidió construir, en ese mismo lugar, un pequeño templo predecesor al actual.
A finales del siglo XII los canónigos regulares de San Agustín comenzaron la construcción de una nueva iglesia, aunque fueron los templarios quienes la concluyeron durante el siguiente siglo. En ella se encuentra el sepulcro de la Santa; construyéndose, en siglo XVIII, un mausoleo con su figura.
Santa Mariña de Aguas Santas constituye un conjunto histórico, artístico y monumental en un gran entorno paisajístico, en el que historia y leyenda se dan la mano, por lo que en el año 1931 fue declarado Monumento Histórico-Artístico y en 1963 Conjunto Monumental.
La iglesia es un templo románico con toques góticos, aunque ha sufrido variadas reformas barrocas, como la modificación de su campanario.
Es un edifico de tres naves que finalizan en sus respectivos ábsides semicirculares. Sus muros laterales están compuestos por grandes arcos de medio punto que se apoyan sobre cuatro contrafuertes y, entre ellos, tres pequeñas ventanas.
Su fachada principal está dividida en tres calles por medio de cuatro contrafuertes. La central está compuesta por una portada con dos arquivoltas apuntadas que descansan sobre dos pares de columnas con capiteles decorados con motivos vegetales. Sobre esta portada se encuentra un laborioso arco ciego de medio punto.
La fachada se completa con tres rosetones, el central mucho más grande que los otros dos, un campanario en el centro y dos pequeñas torres circulares a sus extremos.